Los colores tienen diversos simbolismo que nos ayudan a cada situación específica.
La combinación de dos colores potencia aún más el ritual y le brinda una mayor fuerza a nuestras peticiones.
El color blanco simboliza la pureza, la sencillez, la castidad, la unión de la pareja o familiar. Se asocia también con la protección contra energías negativas, además aporta mucha calma y tranquilidad. Nos ayuda a equilibrarnos espiritualmente.
El color rojo, por su parte, está asociado a la fuerza, vitalidad, amor y pasión. Su energía está asociado al placer, sensualidad y sexualidad con la pareja.
La unión de ambos colores nos ayuda a atraer a la persona amada o deseada, ejerceremos dominio sobre ella y obtendremos un fuerza magnética poderosa.