El ágata es una piedra semipreciosa de múltiples colores, que provienen de la familia de los cuarzos y podemos encontrar yacimientos en algunos países de América y en algunas zonas de la India y Madagascar.
Las propiedades que posee son infinitas, entre las cuales podemos destacar:
Es una fuente energética de equilibrio físico, mental y emocional.
Su energía armoniza las energías yin y yang, lo positivo y negativo.
Su poder radica en ayudarnos a potenciar la concentración, el análisis y mejorar nuestra memoria.
Emocionalmente, sube nuestros ánimos, alivia las heridas del alma y corazón y nos ayuda a superar miedos y angustias.
Es un limpiador de energías natural.
A nivel físico, cura dolencias referentes a temas gastrointestinales y de páncreas.
También ayuda a curar defectos en la piel.
Se trata de un amuleto protector que refuerza tu autoestima y amor propio.
LLeva siempre un ágata como amuleto para cuidar tu energía y fuerza personal.