El Ojo de Venado actúa como escudo para cualquier envidia, mal de ojo y maleficio que alguien pueda haber lanzado sobre ti.
Protege de las influencias negativas del entorno sirviendo como un repelente de las malas vibras. Su energía nos aumenta la autoconfianza, autoestima y seguridad.
Fortalece la voluntad y ayuda a recorrer los caminos con firmeza y límites, sobretodo en situaciones que requieren un máximo esfuerzo que nos puedan hacer renunciar.
Se puede llevar como amuleto en una bolsita o saquito.