El ónix negro era un mineral muy precioso y usado en la antigüedad. Hay documentos que muestran que los romanos lo usaron para hacer sellos, broches y pendientes, donde las señales del zodiaco fueron grabadas para usarlas como talismanes.

Cuando en contacto directo con la persona, el onix limpia el aura, pero los beneficios no permanecen aquí: si dejamos la piedra en casa, en las esquinas, en la sala … el onix purificará la casa. Si se coloca debajo de la cama donde dormimos, nos liberará de pesadillas y ayudará a dormir tranquilamente.

Es una gema de poder, con su vibración sabia transforma las malas intenciones y protege bondadosamente al portador de ella. Conoce los misterios de la vida y de la muerte, el onix transmite seriedad, humildad y confianza, sin darse cuenta su portador verá cómo se aclaran sus dudas, su fuerza mental aumentará y recibirá vibraciones de paz.

Usado en terapias, el ónix negro proporcionará calma y paz interior. Nos ayudará a superar los miedos, proporcionarnos alegría, buen humor y estados de risa, es una joya tonificante y fortalecedora, eso nos traerá la claridad de los pensamientos.