Los colores tienen diversos simbolismo que nos ayudan a cada situación específica.
La combinación de varios colores potencia aún más el ritual y le brinda una mayor fuerza a nuestras peticiones.
El color amarillo se asocia al intelecto, a la rapidez mental y a la riqueza material. Nos aporta mayor ambición para emprender nuevas situaciones, sobre todo en el ámbito del estudio y/o profesional.
El color verde, por su parte, está asociado con el crecimiento y desarrollo personal. Además también asociado a la esperanza y a la salud física y mental.
El color blanco, finalmente está asociado a la pureza, sencillez y paz. El color blanco ayuda a aclarar situaciones dudosas o confusas.